Fiestas, Ferias, Romerías... de Borja

Las fiestas tienen una duración de cuatro días, se inician el viernes y terminan en la medianoche del lunes del primer fin de semana de mayo.

El domingo, día grande de las fiestas, se venera a la Patrona de la ciudad, la Virgen de la Peana, y se realiza la ofrenda de flores. Hacia las 20 horas, sale a las calles de Borja el Rosario de Cristal.

Hay encierro de reses bravas, incluyendo el toro embolado por la noche, almuerzo popular en la Plaza del Mercado, parque infantil gratuito y actuaciones musicales, terminando las fiestas con la correspondiente traca.

Estas actividades festivas se complementan con numerosas actividades culturales, como exposiciones, actuaciones de grupos folclóricos, banda municipal de música... y la aparición en estos días de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Borja, compuesta por: El Rey, la Reina, el Berrugón y la Morica.

El Rosario de Cristal de Borja constituye una de las principales manifestaciones de amor, por parte de los borjanos, a su Patrona la Virgen del Rosario, en su advocación de Nuestra Señora de la Peana, una imagen de busto de gran valor artístico, venerada desde el siglo XVI en la colegiata de Santa María y cuyo estudio y atribución está todavía pendiente.

El Rosario fue creado en 1928 (este año ha cumplido sus 90 años) respondiendo a la propuesta del canónigo borjano Dr. D. Juan Federico Magdalena Lacambra, el cual pasaba la temporada estival en el Santuario de Misericordia, donde en el verano de 1927 la expuso a un grupo de sacerdotes que la acogieron con entusiasmo, especialmente por parte del entonces párroco D. Roque Pascual.

El 12 de octubre de ese mismo año el capellán de la Virgen D. José María Pereda y D. Agustín María Sierra publicaron una nota en el periódico local Ecos del Moncayo, en la que invitaban a todo el vecindario a colaborar en el proyecto. La respuesta fue tan rápida y extraordinaria que, en muy poco tiempo, se pudieron construir los faroles que desfilaron, por vez primera, el primer domingo de mayo de 1928 (ese año fue el día 6), festividad de nuestra Patrona.

La construcción del mismo hay que enmarcarla en una tradición aragonesa, cuya mejor expresión la constituye el Rosario de Cristal de Zaragoza, creado en 1889, cuyos faroles fueron diseñados por el arquitecto D. Ricardo Magdalena Tabuenca, cuyos padres eran de Borja, y además estaba emparentado con el canónigo citado.

El Rosario de Borja fue construido en los talleres Quintana de Zaragoza, los mismos que habían realizado el de la capital aragonesa y fueron enteramente sufragados por las aportaciones de aquellos fieles que quisieron adquirir alguno de mano, en cuyo poder se conservaron hasta época reciente, y los de otras personas y entidades que asumieron el coste de los faroles de mayor tamaño.

A diferencia del de Zaragoza que está integrado por todas las partes del Rosario, el de Borja sólo lo constituyen los Misterios Gloriosos, junto con otros faroles monumentale.

Texto: Centro de Estudios Borjanos

Uno de los actos que más interés despiertan en todas nuestras fiestas es la salida de la comparsa de Gigantes y Cabezudos. Por ello, ayer a las doce de la mañana numerosas personas la acompañaron en su recorrido por las calles de la ciudad, con la sorpresa añadida de las nuevas incorporaciones que han hecho aumentar el número de sus integrantes.

Porque la comparsa de Borja surgió en 1889, con ocasión del I Centenario de la Virgen de la Peana, en el que uno de los números que más llamaron la atención fueron los gigantes y cabezudos creados, según el diseño de D. Baltasar González, por el artista local D. Manuel Urchaga. Eran entonces un hada y un nigromante que, pocos años más tarde, fueron sustituidos por un rey y una reina que, junto a los cabezudos el 'Berrugón' y la 'Morica', fueron los habituales durante muchos años. 

En 2011, fueron recreados el hada y el nigromante de los orígenes a partir de unos antiguos reyes que se conservaban en los almacenes municipales y se hizo costumbre que, junto a los cabezudos tradicionales, desfilaran los de la cofradía de San Bartolomé.

Tres años después se incorporaron dos 'giganticos' de menor tamaño que también representaban a un rey y a una reina, de manera que ya teníamos seis gigantes en la comparsa.

Una comparsa que, por cierto, en el caso de Borja siempre ha sido acompañada por una banda de música. Ahora, por la Agrupación Musical Borjana, al son de cuyos instrumentos 'bailan' los gigantes que, en el caso de los grandes, son llevados por un grupo de voluntarios, creado al efecto.

No obstante, en una reciente concentración que tuvo lugar en Alagón, nuestros gigantes contaron con la presencia de los gaiteros de Albeta, siendo la primera ocasión en que bailaron con instrumentos tradicionales.

Pero, la comparsa no ha dejado de crecer, debido a la iniciativa privada y, el pasado año, hizo acto de presencia un nuevo rey que D. Sergio Pérez había construido para su hijo. Se trata de una réplica del de tamaño mayor, incluido el traje. En su momento, quisimos hacernos eco de este acontecimiento pero el encargado de facilitarnos las imágenes del evento no llegó a enviarlas.

Lo hacemos ahora, cuando acaba de producirse la incorporación de un nuevo 'gigantico', obra de D. Alfonso Navarro que, como es lógico, ha elegido como modelo a un guerrero con su yelmo y el escudo con la señal de Aragón. Para ser San Jorge no le falta mas que el dragón a sus pies.

Así posaban de orgullosos los destinatarios de estos formidables regalos. Si el ejemplo cunde y otros padres se animan a construir nuevos gigantes, la comparsa de Borja podrá entrar, en poco tiempo, en el libro Guinness. 

Texto: Centro de Estudios Borjano

• Álbum de ÓSCAR PUIGDEVALL en flickr.com - Año 2013
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